viernes, 25 de octubre de 2013

Un nuevo libro de poesía en Boedo


Hoy viernes a las 21, con entrada libre y gratuita, se presenta el libro “Luminoso silencio” en  la Casa de la Cultura SanLorencista (José Mármol 1691).  El autor es el poeta Héctor Rico, fanático de San Lorenzo y reside desde hace 5 años en Villa Giardino Córdoba.
Es importante destacar que Rico tenía el deseo de efectuar la presentación de su obra en un espacio de San Lorenzo, por ello se comunicó con la Casa de la Cultura.  La respuesta del Director de la Casa Adolfo Res  fue rápida: “Que mejor que un ámbito cultural de San Lorenzo, para que un simpatizante presente su obra”.
Héctor Rico obtuvo distinciones a nivel nacional, provincial y municipal. Es Faja de Honor de  laAsociación de Escritores Argentinos (A.D.E.A.) Mendoza 1999 por su libro Retrato de Viento. Entre otras distinciones fue jurado en el Primer Concurso Nacional de Poesía organizado por Sociedad Argentina de Escritores (SADE), sede central, año 2000. Sus últimas obras son: "Escrito en los espejos" (Buenos Aires, 2006), "Palabras para Agustín" (Buenos Aires, 2007) y "Arco Iris de Palabras" (Córdoba, 2010) en la que realizó una recopilación de literatura Infantil.

El Espejo

La llama palidece,
el tiempo se abre en los labios,
dejando en la boca un eco
de destierro.

Es el despertar de la sangre
sonora.
Es otro nacimiento de pájaros.

El cuerpo se manifiesta
y despereza un sueño.

El cuerpo adviene
en su sagrado resplandor.

Sabe de magia, de jardines siderales,
de ríos vaporosos
vertidos en la niebla.

Huele a llovizna,
a reconciliados minerales,
a luces de estrella desclavada,
incendiada en la piedra,
alzada sobre los abismos,
sobre el vacío
donde se sumergen
las alas y los líquenes.

Es sólo un rostro,
una mueca de la forma
donde languidece la mirada.


Es la piel anunciando su extrañeza,
su espesura de sombra,
su crecimiento entre las horas.

Hojarasca del tiempo,
dinastía de presagios.

Es sólo un rumor de corteza,
un zumbido de raíz creciendo
hacia lo profundo.

Una pausa de candor,
de criatura que afirma su existencia,
su levedad y su número.

En el tumulto de los días
que no alumbran
y se dispersan entre las cenizas
-despojos de otros alumbramientos-.

Es el aparecido que se invoca,
que inclina su fuego
para trasparecer
entre las aguas quietas
que nunca se atraviesan.

Entre las duras aguas
que se interponen
entre la luz y la piel,
entre el oculto y
su apariencia.


de Héctor Rico, Villa Giardino, Córdoba




Prensa Cultura CASLA 

“Inclusión y Docencia”

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